Llegamos en un barco de
Escapábamos después de sentir como mataban a mis padres por el frente de la casa, nosotros por atrás y por los techos huíamos agazapados con unas pocas joyas que mi madre le puso a mi mujer en el corpiño. No teníamos nada. La ropa era de pleno invierno, pero teníamos un calor terrible, porque había incendios por todos lados.
Los soldados alemanes entraban a las viviendas y si eran judíos los aniquilaban y prendían fuego. Caían balas de todos los rincones. Escondidos, viajábamos de noche y nos escondíamos de día. Así atravesamos por las calles de Budapest hasta llegar a la campiña. Los bosques estaban poblados de gente que escapaba de las tropas de ocupación.
Pasamos hambre. Yo trataba de buscar comida donde fuera. Rescaté de algunos muertos unas botas y un carro abandonado. No traía mi título de odontólogo. Era un simple vagabundo escapando de los enemigos. Mi hermosa esposa, éramos muy jóvenes y recién casados, escondía entre sus bragas algo de dinero. Pero nadie lo quería. Faltaba comida y sobraba hambruna.
Hoy trato de agradecer haber escapado del infierno y estar vivos, hemos construido un hogar con doshermosas hijas. Dios dirá cuál será su destino.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario