viernes, 19 de agosto de 2022

A CHARLES BAUDELAIRE

 

Hombre con hambre de piel de hembras.

Amapolas con sabor a fiebre. Delirio.

Sueños abstractos. Ajenjo y risas histéricas.

Poeta maldito, genio inalcanzable

Creador de fantasmas y rimas de enorme belleza.

Locas. Putas. Mujeres y bohemia.

 

Un universo de gracia y amor de ramera conquistada

con belleza y odio. Sífilis y dolor.

Arrancó la muerte a las lápidas de mármol,

una pasión relatada bajo la lluvia de París

que envuelve al Hombre de infancia dolorosa y triste.

Caen lágrimas de Rilke y Joyce sobre el papel en blanco.

 

Rudo al caminar con las manos marcadas de opio,

una botella rueda en su camino de alcoba

con mujeres, prostitutas, hembras y hachís mortal.

En la noche se pierde en sombras de Montmartre.

No regresa. Olvido y mucha historia.

Un mar de olvido y placer su obra de poeta.

Charles Baudelaire no ha muerto. Vive.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario