MI SED …
Mi sed de cielo, de tocar las estrellas con la frente
Mis senos deshojando azaleas amarillas
Mis manos mirando con decoro el viento que viene del futuro.
Una nube pasa por mi piel de noche iluminada por la luna.
Madre del universo, el cansancio se ha convertido en lienzo
Cubriendo mi cuerpo en este rincón de espejos, hielo azul
Continuando improvisada llamarada de escombros,
Mi paraíso de gris con aroma de duraznos maduros.
Mi sed de enredadera apretada a mi cuello y mi garganta.
Mi vientre, jardinero de piedras que impiden las palabras.
Mis pies cansados de andar descalzos por la tierra estéril.
Ahora, sólo ahora despierto al rondar de aves, de avutardas
Gritan como los truenos en el valle perdido. Migrantes.
Me pierdo en la hojarasca caída en la pradera. Otoño.
Avanzo rodeada de delfines en un mar de alabastro.
Unas lágrimas caen, lentas como plumas de pájaros granate.
Mis lágrimas de jade, mis besos de algodón y sangre.
Caen, caen y se pierden en una grieta del mármol albo.
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