El dolor es un barco con velas rotas que no puede
navegar.
El dolor es un guante oscuro que uno pierde, el otro
no sirve para calentarse el alma.
El dolor es el aullido de viento que se pierde en la
noche.
El dolor es un retortijón del alma.
El dolor puede morderse pero no se traga.
El dolor se llora más con el alma que con los ojos.
Hay quienes al dolor lo esconden como a un hijo
enfermo.
Hay quien al dolor lo viste de fiesta con esmoquin
y sale a trasnochar en bares de dudosa moral.
Hay quienes al dolor lo abrazan para siempre como a un
juguete de peluche.
Hay quienes al dolor lo sacuden como a la alfombra
después de un largo invierno.
Yo escapo del dolor como del humo del cigarrillo.
Yo siento dolor en medio del rostro de los niños de la
calle.
Yo veo el dolor a kilómetros de distancia.
Yo sueño olvidarme del dolor que viví con la pérdida
de ella, mi hermana.
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